una historia de terror: idea de mi hermano

Los peligros de andar solo

Hace mucho, mucho tiempo, un niño se fue con su madre, de visita hacia un tío suyo, el cual vivía en el campo, ya que eran sus vacaciones. Cuando llego aquel chico se durmió y al otro día se marchó a conocer el bosque que estaba cerca de la granja del aquel tío, claro está, sin permiso de su madre.

Allí había muchos animales y plantas también, además de un tigre que al ver al niño fue tras él, al verlo como presa; aquel niño salió corriendo ante tal sorpresa y saltando pudo subirse a un árbol rápidamente, salvándose así de una muerte terrible apenas por el momento, pero aquel muchacho no tomaba en cuenta la actitud del tigre frente a esto, el cual se echó de inmediato a los pies del árbol, esperando y con pereza estirando.

El niño permaneció en aquella rama hasta el otro día, con hambre, sueño y sed al haber pasado tantas horas allí, por lo tanto ya estaban en su búsqueda preocupados su tío y su madre. La madre se fue a buscarlo por los lados del rio y su tío se adentró hacia el bosque examinando el paisaje.

Cuando el tío de aquel muchacho se acercaba hacia el lugar donde aguardaba nuestro protagonista, el niño oyó los pasos de su familiar y alegre gritaba con clamor para una futura ayuda, el tío corrió en busca de su sobrino, sin saber siquiera que el tigre ya lo estaba observando, de un momento a otro de un salto y de un zarpazo acabo con la vida de aquel tío, devorándolo de inmediato.

El niño al ver esa escena ante sus ojos, lloro desesperadamente, pero no desaprovecho la oportunidad de escapar. Bajo del árbol y salió corriendo en destino hasta la granja de su ya difunto tío.

Apenas llego, a nadie vio, con preocupación a su madre busco, y después de un tiempo, ella regreso, y cuando lo vio mucho lo regaño, pero preocupada se sintió, al no ver a su hermano mayor, a lo cual al niño pregunto:

-¿no has visto a tu tío hoy?

El niño llorando no le mintió, le conto la historia con toda aflicción, a lo cual la madre no le creyó, solo sonrió y dijo riendo: -que imaginación.

Aun así la madre, no podía esperar, y se fue en busca de su hermano para después llevarlo a cenar, sin pensar, que el niño le gritaba sin cesar: -madre, hacia al bosque no puedes ir, hay peligro y no te dejare salir. Pero la madre molesta solo le advirtió: -quien te crees mocoso, para mandarme a mí, hoy.

La señora salió y el niño la acompaño, y con mucho miedo al bosque entro, cuando estaban cerca al lugar, donde el tigre descansaba de almorzar, el niño vio entre la maleza de aquel lugar, los huesos del tío que descansaba en paz, a lo cual al mostrar a su madre, ella grito, despertando así al durmiente de su sueño anterior.

De un momento a otro, el niño y la madre corrieron, pero para desgracia de la mujer, el tigre la alcanzo primero, a lo cual ella dio un grito desgarrador que dejo al niño traumatizado de por vida, el niño no podía pensar en nada más y sin tener en cuenta el peligro al que estaba expuesto corrió a la ayuda de su madre, pero cuando volvió al lugar donde había escuchado los gritos agonizantes de aquella mujer, no se encontró con nada más que un cuerpo ensangrentado que ya ni siquiera mostraba signos de vida, así el no pudo hacer nada más, se quería entregar a aquel tigre pero no se presentó, así que triste retorno a la granja y al otro día se marchó y mientras esperaba aquel bus que lo llevaría a la ciudad, alucinaba sin parar por culpa de la experiencia atroz de la noche anterior, cuando el transporte estaba por llegar, tuvo una última visión, al ver al tigre que lo perseguía por última vez, el muchacho ya no quería sufrir más y corrió a su encuentro sin pensar, que terminaría al final, atropellado por el bus que le daría su libertad.

Moraleja: no andes solo al viajar, mucho menos donde no te fíes ya, a veces confía en las personas que te quieren ayudar, más si es tu familia aun, y por ultimo no te dejes derrotar, que la vida es bella y la puedes afrontar.

Att: el escritor